[Intracavitary electrocardiogram (IC-ECG) guidance for peripherally inserted central catheter (PICC) placement]

Nutr Hosp. 2018 Oct 5;35(5):1005-1008. doi: 10.20960/nh.1847.
[Article in Spanish]

Abstract

Introduction: intracavitary electrocardiogram (IC-ECG) guidance has been recently proposed for peripherally inserted central catheter (PICC) placement since it may reduce the time of placement and avoid radiological control.

Objective: to evaluate IC-ECG compared to conventional radiological control. METHOS: prospective study of 532 consecutive patients. Those with arrhythmias or on antiarrhythmic drugs were excluded. In all cases, PICC tip placement was checked by IC-ECG guidance and by a chest X-ray, which was considered as the reference test.

Results: PICC placement with IC-ECG guidance was achieved in 96.8% of patients (applicability). PICC correct placement according to IC-ECG guidance was confirmed by chest X-ray in 94% of patients (accuracy). In 13 patients (2.7%) the catheter had to be repositioned after radiological control. The κ concordance index was 0.356 (p < 0.001). The IC-ECG sensitivity was 0.98, with a PPV of 0.97 and a positive likelihood ratio of 1.5. However, the specificity was only 0.35 with a NPV of 0.41 and a negative likelihood ratio of 0.06.

Conclusion: PICC placement by IC-ECG guidance is plausible, safe, presents adequate indexes of validity and reliability, and allows reducing the time of catheter placement. However, radiological verification is still necessary, especially in cases of negative or uncertain ECG.

INTRODUCCIÓN: recientemente se ha planteado la posibilidad de comprobar la colocación de los catéteres centrales de inserción periférica (PICC) mediante control electrocardiográfico intracavitario (ECG-IC) ya que permitiría disminuir el tiempo de colocación y evitaría el control radiológico. OBJETIVO: evaluación de dicho método frente al control radiológico habitual. MÉTODOS: estudio prospectivo en el que se incluyeron 532 pacientes de forma consecutiva. Se excluyeron aquellos pacientes con arritmias o en tratamiento con fármacos antiarrítmicos. En todos los casos se comprobó la colocación de la punta del PICC mediante control ECG-IC y mediante la realización de una radiografía de tórax, que fue considerada método de referencia. RESULTADOS: la colocación del PICC gracias al control ECG-IC (aplicabilidad) fue del 96,8%. La correcta colocación del PICC gracias a la interpretación del ECG-IC se confirmó en un 94% de los casos con la radiografía de tórax (precisión). En 13 pacientes (2,7%) se requirió la recolocación del catéter tras el control radiológico. El índice κ de concordancia fue de 0,356 (p < 0,001). La sensibilidad del método ECG fue de 0,98, con un VPP de 0,97 y un cociente de probabilidad positivo de 1,5. Sin embargo, la especificidad fue solo del 0,35 con un VPN de 0,41 y un cociente de probabilidad negativo de 0,06. CONCLUSIÓN: la comprobación de la colocación de los PICC mediante ECG-IC es plausible, segura, presenta unos índices de validez/fiabilidad adecuados y permitiría disminuir el tiempo de colocación del catéter. Sin embargo, la comprobación radiológica sigue siendo necesaria, especialmente en los casos de ECG negativo o dudoso.

MeSH terms

  • Adult
  • Aged
  • Aged, 80 and over
  • Catheterization, Central Venous / methods*
  • Catheterization, Peripheral / methods*
  • Electrocardiography / methods*
  • Female
  • Humans
  • Male
  • Middle Aged
  • Prospective Studies
  • Radiography, Thoracic
  • Reproducibility of Results
  • Thorax / diagnostic imaging